miércoles, 13 de febrero de 2008

cuentos cortos II

Jorge estaba sentado, cuando vio entrar a Clara por la puerta y sentarse a dos mesas de el.

Su café enfriabase y su cigarrillo consumiase, luego de un rato el desidiose hablarle; cuando acercose, carraspeo su garganta, ella mirole, el sonrriose y ella respondiole:

-Una lagrima por favor.

El diose media vuelta y alejose lentamente.